Estudio crítico sobre las apariciones en El Palmar de Troya

Aquí le exponemos una multitud de información y varios documentos relacionados con las apariciones y los videntes de El Palmar de Troya, para que Vd. pueda enterarse de primera fuente y certificarse de la autenticidad de los hechos sobrenaturales ocurridos y mensajes dados en El Palmar de Troya en los años 1968 hasta 1978, hasta ahora siempre negados de la publicidad. Citaremos el amplio estudio crítico sobre el lugar de apariciones El Palmar de Troya, escrito por el Dr. Gerardo R. Alfaro y publicado en Argentina como prólogo en el libro "El Palmar de Troya - Mensajes sobrenaturales" en 1975 por Difusora Mariana Argentina. Dr. Gerardo explica y expone estos hechos tan discutidos con claridad y convicción, probándolos con documentos y fechas históricas. El estudio abarca los siguientes temas:


bullet1. Al lector
bullet2. El lugar
bullet3. Los hechos
bullet4. Los mensajes
bullet5. Las objeciones
bullet6. Los mensajes y la revelación
bullet7. Los mensajes y la autoridad eclesiástica
bullet8. Los mensajes y usted, lector

Además deja entrever claramente la caótica situación de la Iglesia Católica de aquellos años, la cual forzó a Jesucristo y su Santísima Madre a intervenir en este último siglo recién pasado de esta manera especial, para poder salvar a la barca de Pedro. Citamos, pues, a continuación al Dr. Gerardo: "...


I. AL LECTOR 

Difusora Mariana Argentina ha decidido publicar los mensajes dictados al vidente Clemente Domínguez Gómez en El Palmar de Troya, Utrera, Sevilla, España, conforme al texto entregado por el mismo vidente, y me ha solicitado la redacción del prólogo de presentación.

He aceptado con gusto y con temor. Por una parte, me entusiasma la idea de colaborar en la difusión de estos mensajes que considero verdaderos y, además, importantísimos para la Iglesia y para el mundo; pero, por otra, me intimida la grandeza del asunto.

Y acepté porque el hecho de conocer personalmente a Clemente Domínguez desde el año 1972 y la circunstancia de haber estado en El Palmar de Troya a fines del año 1973 y a principios de 1974, presenciando y estudiando las apariciones y demás acontecimientos extraordinarios allí ocurridos, me obligan, ciertamente, a dar testimonio de la verdad vista y oída “in situ”.

Hago presente que mis comprobaciones personales coinciden con las que cumplieron los demás integrantes de un grupo de dieciocho argentinos que, bajo la dirección espiritual del Padre Silvio Venturini, viajamos a Sevilla a fines de 1973, precisamente con ese propósito.

Asumo exclusivamente la responsabilidad de este prólogo; con gusto daré, a quienes lo soliciten, las explicaciones y aclaraciones que estimen necesarias, y desligo por completo a Difusora Mariana Argentina y a mis compañeros de viaje, de todo compromiso por los errores que, eventualmente, puedan deslizarse.
Me atengo, desde luego, al decreto de la Santa Sede de fecha 15-11-66, publicado en “Acta Apostolicæ Sedis”, Vol. 58, N. 16, que derogó la antigua exigencia del “Imprimatur” para la divulgación de apariciones y revelaciones privadas. Pero me someto, desde ya, al juicio definitivo de la Iglesia.

Y ahora me dirijo con vivo interés al lector, creyente, incrédulo o ateo, justo o pecador, eclesiástico o seglar, tradicionalista o progresista, poderoso o débil, culto o iletrado, sano o enfermo, para decirle, afectuosamente, que tiene en las manos un libro de esos que pueden cambiar por completo el tono y aun el rumbo y el destino de su vida.

Comenzará esta introducción, por exponer, objetivamente, hechos comprobados e incontrovertibles, con precisión de lugares, fechas y personas; hechos que nadie hasta ahora ha podido explicar humanamente y que, en definitiva, van a enfrentar al lector con la realidad sobrenatural que en nuestros días se vuelca profusamente sobre la tierra para anunciar gravísimos y muy próximos acontecimientos.

Después de exponer los hechos ocurridos en los lugares precisos que hemos recorrido, y después de concretar los mensajes, se examinarán con espíritu crítico las objeciones que contra ellos circulan en ciertos ambientes faltos de la debida información.

Y terminará esta presentación reflexionando sobre las tres graves e ineludibles cuestiones que espontáneamente surgen, a saber: a) Los mensajes y la Revelación; b) Los mensajes y la Autoridad Eclesiástica; y c) Los mensajes y el lector.

Comencemos, pues, concretando claramente dónde, cuándo y cómo ocurrieron los hechos que, en El Palmar de Troya, vienen sucediéndose a partir del día de la primera aparición de la Santísima Virgen, 30 de Marzo de 1968, y continúan produciéndose en lo que va del año 1975, con ritmo e intensidad crecientes.


Orden de los Carmelitas de la Santa Faz en compañía de Jesús, María y José